Cuando Ataca la Pereza
Ayer tuve pereza y no escribí absolutamente nada. La inspiración no llegó por más que la busque en todos los rincones y en todos los lugares.
Fue un día de esos en los que solo quieres contemplar la vida pasando a tu lado y no quieres interrumpir su flujo constante de acontecimientos.En esos momentos no deseas ser un actor más en ese teatro. Quisieras por una sola vez, ser unicamente espectador. Quisieras no verte afectado por el ir y venir de los acontecimientos.
Gran día pase ayer, sin preocuparme, sin estresarme, sin nada en mi cerebro que rompiera el encanto de ser solamente un ente externo en ese marasmo llamado vida.
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